Gonzalo Calvo quien era el secretario de Articulación de Política Social, tuvo que dejar su cargo en el Ministerio de Desarrollo Social, por la polémica compra de alimentos a valores superiores a los precios impuestos por la SIGEN como de referencia.
El ministro Daniel Arroyo fue quien decidió su desplazamiento, solo unas horas después de que el presidente ordenara cancelar el correspondiente pago, y advirtiera que el Estado Nacional no va a permitir ni abusos ni casos de cartelización por parte de los proveedores.
La compra cuestionada era una licitación para adquirir bolsones – azúcar, leche, lentejas, aceite, harina y fideo-- para poder cubrir la demanda en los comedores, que se incrementó de 8 a 11 millones de personas, pero lo llamativo fueron los elevados precios que se pago en particular por las partidas de aceite y azúcar.
El Presidente Alberto Fernández ordenó suspender el pago y estableció que a partir de ahora el tope para cualquier compra serán los precios máximos fijados por el propio Gobierno, además resaltó que se abrió un sumario interno para investigar la operatoria, advirtiendo que en caso de detectar algún ilícito el sería el primero en perseguirlo, por lo que la renuncia de Gonzalo Calvo es la primera secuela.